RESEÑA HISTÓRICA
Fundación Caminos de Esperanza – Talita Kumi
“Niña, Levántate” (párrafo de la Biblia: Marcos 5:41)
Somos una institución sin fines de lucro que brinda apoyo a adolescentes en situación de vulnerabilidad. Trabajamos para que estos jóvenes puedan superar las dificultades que enfrentan y evitar los riesgos de la calle.
Desde su inicio en 1990, Talita Kumi ha transformado la vida de más de jóvenes, demostrando la eficacia de su compromiso con el empoderamiento y desarrollo autónomo de sus 1500 beneficiarias.
La fundación nació en respuesta al creciente empobrecimiento y las desigualdades sociales en Ecuador a finales del siglo XX, lo cual resultó en desempleo, subempleo, y migración, empujando a muchas jóvenes a situaciones de vulnerabilidad. Talita Kumi, que significa “Niña, levántate”, fue fundada en 1990 en un barrio pobre de Quito por iniciativa del Padre Francisco Hervás, la Madre Isabel Galarza, y la señora Thekla Amen, con el fin de ofrecer un refugio y una alternativa de vida a las jóvenes expuestas a los peligros de la marginación.
Estructura Organizativa y Modo de Operación
Con dos casas principales en Quito, la fundación proporciona cuidados intensivos y formación ocupacional, respaldadas por una estructura legal solida y colaboraciones internacionales. La fundación opera a través de dos casas, Talita Kumi I y Talita Kumi II, cada una diseñada para atender diferentes necesidades de las jóvenes y sus hijos en un marco protector:
- Talita Kumi I: Ofrece cuidados intensivos, hospedaje, atención médica, psicológica, legal, social, y educativa a jóvenes entre 12 y 18 años, muchas veces embarazadas o con hijos pequeños. Se enfoca en trabajo social para mejorar la situación personal de las jóvenes, investigando sus orígenes y contactando a sus familias si es posible, con la finalidad de insertarlas en la familia.
- Talita Kumi II: Complementa y perfecciona la el concepto de Talita Kumi I, ofreciendo un ambiente familiar y formación ocupacional para el desarrollo integral de las jóvenes después de superar conflictos difíciles. Se planifica una visión de futuro con metas concretas para cada joven, buscando desarrollar sus capacidades para una vida autónoma.
La fundación fue legalmente constituida y reconocida en agosto de 2006 como una entidad de derecho civil sin fines de lucro. Está encargada de determinar las orientaciones del proceso de formación, el régimen interior de cada casa, y vigilar su ejecución. Además, es responsable de la contratación de empleados, la elaboración de presupuestos anuales, y el control de la utilización de los recursos financieros.
Apoyo internacional y colaboraciones
La fundación cuenta con el apoyo del Círculo de Trabajo Ecuménico Talita Kumi (OKUMENISCHER ARBEITSKREIS TALITA KUMI e.V.) en Alemania, que suministra los medios financieros para la ejecución del trabajo. Este círculo de trabajo colabora estrechamente con la fundación, manteniendo una comunicación fluida y transparente, y apoyando con donaciones provenientes de parroquias, escuelas, grupos, y donantes individuales tanto en Alemania como en Suiza.
La fundación tiene más de 30 años de existencia, transformando la iniciativa privada en una obra considerable que ha acogido a más de 1500 niñas y adolescentes, ofreciéndoles un camino hacia un futuro mejor y digno. A lo largo de los años, ha enfrentado desafíos y superado obstáculos gracias al compromiso y esfuerzo de los miembros de la fundación y el equipo educativo, así como al apoyo de amigos y donantes tanto en Europa como en Ecuador.
Este enfoque integral y la red de apoyo que caracteriza a la Fundación Caminos de Esperanza – Talita Kumi subrayan su compromiso con el bienestar y desarrollo de las jóvenes en situaciones vulnerables, enfatizando la autoayuda, la educación, y la preparación para una vida autónoma y productiva.